Las membranas epirretinianas corresponden a proliferaciones no vasculares de las células retinianas capaces de inducir distorsión de la configuración macular, con consecuente disminución de la agudeza visual y metamorfopsias.
La existencia de estas membranas en edades pediátricas es rara y su diagnostico es frecuentemente tardío. Su tratamiento es urgente por el gran riesgo de ambliopía.
La cirugía es aconsejada cuando hay microdesprendimientos de retina neurosensorial, alteraciones en la barrera hemato-retiniana interna, metamorfopsias o ambliopía. La intervención permite, en muchos pacientes, mejorar significativamente la estructura de la retina y la agudeza visual.
Podemos encontrar estas membranas en la retinopatía de la prematuridad, desprendimientos de retina traumáticos y no traumáticos, uveítis, vitreorretinopatia exudativa familiar, enfermedad de Coats y otras vasculopatías con o sin hemovítreo.